El agua cambia de color

 Actividad muy sencilla y sorprendente.


Necesitamos papeles de seda de colores, agua y una botella transparente de plástico con un tapón grande.




Pedimos al niño que trocee el papel de seda. Una vez troceados podemos pedirle que haga bolitas  con alguno de ellos. 

A continuación llenaremos la botella con agua hasta la mitad. El niño tendrá que introducir los papelitos de un mismo color.

 

Primero las bolitas y a continuación los papelitos sueltos. Cerraremos la botella y pediremos que la agite durante unos minutos. Los papeles se irán deshaciendo
y coloreando el agua hasta obtener un efecto muy llamativo.

Repetiremos el proceso con otros colores.

Una variante al juego anterior es mezclar colores para ver los cambios que se producen.