Cremalleras

 Fabulosa herramienta para desarrollar la psicomotricidad fina y favorecer la aparición de la pinza digital.

A la cremallera convencional podemos añadirle un aro, una cuerda o un elástico que facilite su agarre.

 
Podemos diseñar actividades donde se trabaje la direccionalidad  con trayectorias de izquierda-derecha-arriba-abajo, oblícuos, etc.


Pero lo mejor de las cremalleras es que da acceso a un mundo desconocido y aumenta la curiosidad para descubrir.

Podemos esconder juguetes, objetos de manera que solo haciendo uso de la cremallera puedan tener acceso al "tesoro misterioso escondido".






Mis collares.

 Vamos a realizar collares, pulseras y cuerdas decorativas.

Para la actividad necesitaremos una cuerda y objetos con un orificio en el centro. 


La actividad consistirá en introducir la cuerda por los objetos agrupándolos en función de un criterio como el color, la forma o el tamaño.

Podemos usar estas cuerdas para hacer nuestras pulseras o collares personalizados.

Una variante de esta actividad puede ser utilizar una plantilla con forma de zapato, número u objeto.





La pelota saltarina.

 Con la actividad que hoy proponemos vamos a trabajar conceptos espaciales y colores, 

Para elaborar el material necesitaremos un cartón de huevos, una bolita y papeles de colores.

Una vez terminada fijaremos con papel adhesivo transparente ambas mitades para que no se pueda abrir.

La actividad consistirá en agitar la caja hasta colocar la bolita en el color propuesto.


Podemos aumentar la complejidad del juego introduciendo dos bolitas y repitiendo colores, de modo que tienen que colocar las bolas en dos casillas con el color propuesto.


La caja misteriosa

 La curiosidad es un fabuloso aliado del aprendizaje. Es por eso que no debemos dárselo todo hecho a los niños. Podemos ocultar objetos para que ellos mismos los  descubran. 

En primer lugar elaboraremos nuestra caja. Solo tenemos que recortar un trozo de cartón por donde el niño introducirá la mano y cubrirlo con un trozo de goma eva con unos cortes en cruz.


En mi caso he utilizado una caja de juguete con una de las caras transparente de modo que situados en frente de un espejo el niño puede ver lo que hay en su interior en la imagen reflejada en el espejo.
He introducido diversos animales  de juguete. Al sacarlos de la caja le preguntamos qué animal es y que sonido emite.

Podemos introducir como variantes distintos objetos de campos semánticos diferentes como alimentos, texturas, colores, etc en función del objetivo que pretendamos conseguir.