Periquito parlanchín

 Os traigo un juguete que seguro que os ayudará en la práctica del lenguaje.

Se trata de un pajarito que, tras pulsar un botón, repite lo que se le dice. En el mercado existen numerosos juguetes parecidos. Son muy interesantes ya que ellos pueden observar como el pájaro repite las palabras que se le dice ofreciendo un modelo diferente a imitar. Les encanta que repita todo aquello que ellos quieren. Es muy práctico y sumamente divertido.


Como siempre, recomendamos la supervisión de un adulto cuando trabajamos con material.

La vocales.

 Hola a tod@s.

Os traigo un material que uso para el aprendizaje de las vocales.

Cuando presento una vocal lo hago acompañando el símbolo asociado con su fonema y asociado a un gesto.




Es importante dirigir la atención hacia la boca. Para ello utilizaremos las manos y también es muy útil pintar los labios con pintura facial en un color llamativo (o bien con barra de labios).

Recordad que debéis estar a la misma altura para facilitar el modelado.

Pídeles que te imiten. 

Si tienes la oportunidad practica estas actividades frente a un espejo.El espejo les ayuda a recibir información de la posición de los órganos fonadores.

Yo utilizo un material que ellos puedan manipular, de modo que pueda hacer peticiones como:

Dame la "a", pega la "i"en la pizarra, o bien ¿donde está la "u"?. Vamos a llamar a la "u".uuuuuu.

Podemos utilizar otro tipo de material como variante a la actividad anterior como:


Las canciones son un gran recurso para alcanzar nuestro objetivo.

 





Juego social

 Juego social es aquel en el que el niño tiene que interactuar con otra persona que participa activamente en la dinámica del juego.


 

Ya hemos comentado en otras entradas del blog que se comienza realizando imitaciones.

Unos de los primeros juegos sociales que realizo con los nenes es el de empujar la pelota. Nos sentamos enfrente del niño y detrás nuestra tenemos una bolsa llena de pelotas diferentes. Le mostraremos la pelota presentándola como el juguete más maravilloso del mundo y la haremos rodar hacia él. Le animaremos a que la coja y que nos la mande realizando el mismo movimiento. 


 

Cambiaremos la pelota y repetiremos el proceso.

Podemos incluir un sinfín de variantes como distintas pelotas de colores, de tamaño, texturas, hacerlas botar, sin que toque el suelo, atraparla con una bolsa y todo lo que se te ocurra. Hay pelotas que te permiten abrirlas y esconder otro objeto en su interior. Dan mucho juego porque estimulan su curiosidad y facilitan la atención.